El barrio nació como un sector residencial, carácter que mantuvo por muchos años. Al trasladarse a esta zona el mercado comienza a cambiar la fisonomía del barrio y las antiguas casonas empiezan poco a poco a transformarse en locales comerciales, hasta llegar al presente donde sólo hay comercio.
Los locales más antiguos llevan en el sector entre 35 y 30 años. En general son negocios familiares atendidos por sus dueños, como la Librería Santa María, La Taquilla y Todo Huaso, entre otros.
Por este barrio han pasado generaciones de compradores, que encuentran todos los productos que necesitan, además de la cercanía y buena atención de los vendedores del sector.
Durante 2015 los locatarios conformaron el Grupo Asociativo Local, instancia que se ha convertido en un canal de apoyo y gestión de acciones para darle movimiento y generar una alianza común entre los locatarios.
En 2016 ya se comenzaron a realizar acciones de dinamización y difusión para celebrar la semana de la mujer y el Día de la Madre. Además, se realizarán jornadas musicales en puntos focalizados del sector. También se logró la creación de la imagen corporativa. Y comenzará prontamente la gestión de desarrollo del plan urbano del barrio.
La locomoción colectiva para llegar al barrio es de fácil acceso, ya que se encuentra entre las principales vías de acceso del transporte público como colectivos y microbuses, además de la movilización interurbana que llega a los terminales Rodoviario, Turbus y ferrocarriles que se encuentran cercanos a este barrio comercial.
